martes, 22 de diciembre de 2009

Periódico Horadada Información. Mes de Enero.

UNAS PINCELADAS DE HISTORIA

Los españoles, atraídos principalmente por sus caladeros, llegan en 1884 al Sahara Occidental. Establecieron en Dakhla –Villa Cisneros- fábricas para procesar el pescado.
España encontró en aquellas tierras una sociedad tribal tradicional, independiente y amable, decidiendo establecer acuerdos con sus jefes para construir fuertes y organizar su economía.
A mediados del siglo XX, en la década de los 60, los movimientos de liberación nacionales estaban en auge en la mayor parte del continente africano. Países como Marruecos -1956- y Argelia -1962-, tras sangrientas y duras luchas de liberación, alcanzaron la independencia de sus metrópolis coloniales. En aquella época fueron creados los primeros grupos armados independentistas saharauis.
España, manteniendo vivo su sueño colonial, nombró en 1958 provincia española al Sahara Occidental. Aún así, la ONU aceptó que los saharauis fueran un pueblo con derecho a la autodeterminación y solicitó a España la puesta en marcha de la descolonización.
Pero, España no renunció al Sahara. Reprimió duramente el movimiento civil pacífico de nacionalistas saharauis al comenzar la década de los 70. Como consecuencia de esas represiones, un grupo de jóvenes decidieron pasar a la lucha armada en 1973, creando el Frente Polisario. Este Frente actuó en diversas ocasiones contra el dominio español, hasta que un día, apareció un nuevo impedimento: Marruecos.
El recién llegado Hassan II puso en marcha una estrategia de expansionismo nada más llegar a su trono. Reivindicaba un “Gran Marruecos” que abarcaría, además de sus tierras: parte de Argelia, el Sahara Occidental, Mauritania, Malí y el norte de Senegal.
Mientras el monarca se frotaba las manos pensando en sus próximas conquistas, en España, la época colonial tocaba fondo y pronto –siguiendo las peticiones de la ONU-
se confeccionaría un censo electoral. La población saharaui, casi en su totalidad, era independentista y apoyaban en forma y estilo al Polisario.
Aprovechando la coyuntura de la retirada española y la crisis de poder que se vivía en España con la finalización de la dictadura franquista, Marruecos preparó la invasión del Sahara: la famosa Marcha Verde.
El pueblo español no defendió la independencia saharaui. Debido al estado en que se encontraba y a las presiones de Marruecos, en noviembre de 1975, con la Marcha Verde a las puertas del Sahara firmó en Madrid el reparto de territorio entre Marruecos y Mauritania.
El acuerdo de reparto fue denunciado como ilegal por la ONU, que desde entonces, ha dejado clara la ilegalidad de la invasión y de cualquier solución que no sea la autodeterminación de los saharauis.
Los marroquíes penetraron por el norte y los mauritanos por el sur, provocando el éxodo de la mayor parte de la población civil. Miles de saharauis se adentraron en el desierto, en dirección Tinduf –Argelia-. Este país acogió en su territorio a los refugiados.
A finales de noviembre de 1975, varias de las principales ciudades saharauis ya estaban controladas por los marroquíes y se iban conociendo los horrores a los que los invasores sometían a la población: robos, incendios de casas, torturas, detenciones injustificadas, desapariciones y asesinatos.
Ante tal barbarie, los saharauis seguían huyendo hacia los campamentos que se habían instalado en el interior del territorio. La huida no era fácil. Costó la vida a cientos de personas, principalmente ancianos y niños por las condiciones de calor, falta de agua y alimentos, enfermedades y agotamiento. En febrero del 76, ya eran 50.000 los refugiados que habitaban los campamentos.
Ese mismo mes se conoció el Genocidio Saharaui: la aviación marroquí bombardeó los campamentos habitados por mujeres, ancianos y niños –la mayoría de hombres se encontraban luchando contra la invasión- con fósforo blanco y napalm, armas prohibidas que queman la piel y deshacen la carne y los huesos. El resultado fue de 2.000 muertos.
El Frente Polisario y la Media Luna Argelina se emplearon a fondo para trasladar a la población hacia la región de Tinduf, quedando dividida en dos: los que pudieron huir a territorio argelino y los que se quedaron en los territorios ocupados bajo la invasión marroquí.
Los que se fueron y sus descendientes, malviven en los campamentos de refugiados de Tinduf, 34 años después. Los que quedaron, han seguido sufriendo todos estos años la represión del régimen marroquí. Han seguido las torturas, las detenciones, las desapariciones, violaciones y asesinatos. Son ya miles de muertos y desaparecidos, además de cientos de presos políticos de los que apenas se sabe nada. Uno de los principales centros de detención y tortura, la Cárcel Negra del Aaiun, tiene a decenas de saharauis detenidos y torturados. Todo un ejemplo en derechos humanos.
Hoy, por fin, me alegro de comunicarles que esos conquistadores han perdido una batalla. La activista Aminetu Haidar, sin más ejército que sus amigos ni más armas que su hambre, les ha dado bien a esos líderes de pacotilla. Por donde más les duele.

4 comentarios:

  1. ¡Hola Isidoro!
    Soy Miren, una compañera de la UNED. Me ha encantado este post; cuanto más datos históricos voy absorbiendo creo tener más claro o definido... (no sé muy bien cómo expresarlo) mi lugar en el mundo.
    Bueno, con decirte que voy por la 3ª serie de los "Episodios nacionales" de Benito Pérez Galdós... esa sí que es una cruzada personal... je je je.
    En fin Isidoro, un placer y hasta pronto.
    Te sigo
    ¡Ánimo con los exámenes!
    Miren

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  2. Hola, gracías por el artículo, la verdad es que me faltaban algunos datos y fechas sobre el Sahara que ahora se me han aclarado. Y respecto al libro que recomiendas, lo he leído, son de esos relatos con el "puntito del Quijote" que los devoras en pocos días, conocí al autor en el festival de teatro de Almagro y fiplé como se lo montaba para editar sus libros, él soñó con ser escritor y lo consiguió, es todo un ejemplo.
    Como Miren también estoy en el barco de la Uned y bueno, por aquí estamos, no se muy bien dónde ni cuando
    Montse

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  3. Gracias por el artículo, la verdad que me faltaban algunos datos y fechas sobre el Sahara que ahora se me han aclarado. y del libro que recomiendas, lo he leído, son de aquellos relatos con el puntito del "Quijote" y que devoras en pocos días. Al autor lo conocí en el festival de Almagro y flipe al ver como se montaba la edición de sus libros. Soñó con ser escritor y lo consiguió, todo un ejemplo
    Como Miren, también estoy por la Uned... y nada, por aquí estamos, no se muy bien donde ni cuando
    Montse

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  4. Animo con los examenes y nos vemos por el foro, correo o en clase :).
    Vivian.

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