Creía que se libraría... Nada más lejos de la realidad; aquí os dejo un nuevo poema, robado tan sólo hace un par de días.
¿Quién te ha visto,
y quién te ve?..
Resentido río Segura,
ayer nadando en jabón
embelleciendo el jubón,
y hoy cubierto de basura,
empeñados en mandarte
a la negra sepultura…
Cruzas por un pueblo
casi hoy desconocido,
poblado por cien razas
que no te verán crecido…
En la provincia de Alicante
sé que pasas por Rojales
que es el nombre y apellido
de una villa que te llora
porque hoy te ve perdido…
Quien no estuvo no adivina
lo que digo en estos versos,
pues en la memoria fina
ni se inventa ni imagina
que reflejabas hasta el cielo
en tus aguas cristalinas…
Rodeado de mujeres
te veías sin descanso,
sin cobrar un estipendio
ni una cuota, ni honorarios…
¡Cuánto te debían entonces
por tu fama sin salario!..
por aseado y buena gente
y la colada de diario…
Has abrazado en tu seno
los cuerpos de tanta gente
que hasta parece mentira
que le hayas dado salida
a tanta roña y detergente…
La corriente se ha llevado
la dulzura de ser niños,
la bondad del bondadoso…
por la corriente se ha ido…
No has sido un río más,
has sido toda una vida,
y eso lo sabe quien vivió
muy cerca de tus orillas,
donde la infancia se ve
en el reflejo del día,
y la noche tan callando
refleja vejez sombría…
Los dibujos de tus norias
han salido en los carteles,
anunciándote al turismo
con tu alcurnia y oropeles;
quejarte no puedes ni un día
de no haber probado las mieles
del éxito que se supone
que de este tránsito tienes…
Y es que tu paso por los pueblos
ha dejado tanta huella
que puede verse en los rostros
de lugareños y doncellas,
nada sería aquí lo mismo,
es como un cielo sin estrellas,
¿qué hubiera sido de los sitios
donde tu impronta nos lleva?…
Siempre al cabo del día
quieres quejarte y no puedes
de que a ti no se asomen
hombres, niños o mujeres…
Habrá quien pidiendo un deseo
o en busca de aquellos peces
que ayer tuviste, mas hoy
ni aún muertos sé que los tienes…
Es tu paso un recorrido
por los más ricos lugares,
la longitud que comprendes
la valora quien entiende
de leyendas singulares…
Te cantaron mil juglares
en la provincia de Albacete,
y hoy Murcia te reclama
por el agua insuficiente…
Y qué decir de Jaén,
la tierra que se desnuda
para brindarte ese paso
que tantas tierras emulan
por retenerte a su lado.
Gigante en genio y figura,
grande eres como el Mundo,
pero es más grande la tortura
de aquellos agricultores
que conocen tu premura.
Eres un encanto, Isidoro. Este sencillo poema-protesta es algo antiguo... pero seguirá estando de actualidad mientras este río no sea saneado y "levante cabeza". Quien haya pasado por Rojales sabrá bien de lo que hablo.
ResponderEliminarUn saludo y gracias por las atenciones que me dedicas.
Para quitarse el sombrero. Sí, señor.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo, pilareño. Para quitarse el sombrero. Y, aunque no conste en comentarios, le ha gustado a mucha más gente. Así da gusto robar, eh.
ResponderEliminarUn saludo